Scafati, Luis
Artista plástico argentino, nació en Mendoza, Argentina, el 24 de noviembre de 1.947.
"Dibujo desde que tengo memoria, siempre lo hice, era mi mejor juguete." Dice Scafati en uno de sus múltiples reportajes y después agrega: "Mi viejo me proveía de papeles que traía de su oficina y a veces me prestaba su lapicera fuente, una Parquer gris, ese recuerdo siempre me acompaña."
Hacia historietas estimulado por publicaciones del género que asiduamente llegaban a sus manos, durante algunos años su familia tuvo un kiosco de diarios y revistas."Mi formación estética parte del comic, mucho después, cuando ingresé en la universidad, conocí el mundo del arte. En mi adolescencia mi objetivo era el humor. Admiraba a Quino a Calé, Steimberg, Sempé, Jules Feiffer, y muchos otros que iba descubriendo, eran mis modelos."
A los 17 años publica su primer dibujo de humor en un tradicional diario de Mendoza.
"Pasaba muchas horas dibujando, copiando, inventando, hice el curso por correspondencia de los 12 famosos artistas. Paradójicamente por esos años pensaba que mi carrera universitaria sería psicología. Esto hoy me hace especular que la dificultad mayor es no vernos a nosotros mismos, no conocernos."
En otra nota publicada años atrás se refiere a su encuentro con las artes plásticas: "Casi accidentalmente, un poco incentivado por mi madre, ingresé en bellas artes, fue allí donde descubrí un universo del que no tenía noticias."
Mientras estudia publica dibujos de humor en una revista de Córdoba llamada Hortensia la cual se convierte en un boom a nivel nacional. "Hacía humor pero también quería poner otra cosa, veía los grabados de Sergio Sergi o los dibujos de George Grosz y entendía que ese era un camino, mi gran conflicto en esa época era quedarme en la anécdota, en el chiste." A esto hace referencia en el prólogo de su libro Tinta china cuando dice: "Pienso que la ilustración no debe ser solo un adorno y ajustarse servilmente a un texto. Cada lenguaje tiene sus leyes especiales, sus matices particulares, lo que sirve a este puede no ser efectivo en aquel."
Su paso por la escuela de artes de la Universidad Nacional de Cuyo será fuertemente estimulante. Ese lugar no estaba ajeno a la esfervesencia política y cultural que emergía en el mundo. Charlas, debates y lecturas incidian en los dibujos del joven Safati "Pasaba mi día en los galpones de la facultad, peregrinando de un taller a otro, en el de escultura cuando abríamos el portón aparecía la cordillera de los Andes. También transcurría mucho tiempo escudriñando los anaqueles de la biblioteca. Ahí descubrí a Jean Dubuffet, a Klee, a los grabados de Goya, Ben Nicholson cuyas composiciones abstractas me enseñaron tanto como las charlas con algunos de mis maestros Luis Quesada o Zdravko Ducmelic."
En ese lugar y circunstancia conoce a Marta Vicente, artista plástica, quien tiempo después será su mujer y la madre de sus hijos: Matías, Florencia y Leonardo. "Con Marta vivíamos en una casa antigua, con grandes habitaciones de adobe en una de las cuales instalé mi estudio. Éramos estudiantes y por allí pasaban muchos compañeros y amigos
Hacíamos reuniones políticas o preparábamos una exposición o un asado, había un gran entusiasmo."
Mientras tanto su producción gráfica crece y ya son varios los medios nacionales donde se publican sus dibujos: la cebra a lunares, Mengano, El ratón de occidente son algunas revistas de carácter satírico. Un editor cordobes, Alberto Burnichon, publica un pequeño porfolio con una serie de trabajos llamada Los infiltrados.
Pero en 1.976 la nefasta dictadura militar comienza una caza de brujas en las universidades, Luis Scafati al igual que otros muchos compañeros de estudios son injustamente expulsados de la facultad de artes.
En estas circunstancias emigra con su familia a Buenos Aires, donde se radica. Colabora en el taller de Roberto Paez a quien considera su maestro. "Paéz me transmitió lo artístico, esa antorcha que solo te la puede pasar otro artista, a partir de allí mi mirada cambió."
Siempre con el seudónimo de Fati sus dibujos aparecen en publicaciones como Tia Vicenta, Humor, El péndulo.
A lo largo de estos años son numerosas las exposiciones que realiza de manera individual o grupal, en galerías de arte o museos, en el país o en el extranjero. Recibe en 1981 el Gran Premio de Honor en el Salón Nacional de Dibujo.
Paralelamente publica en la revista humor una serie de dibujos y textos sobre Buenos Aires llamada Mambo Urbano que años mas tarde serán recopiladas en un libro de título homónimo. Otro de sus libros donde reúne dibujos y experiencias gráficas es El tren fantasma editado por Diógenes.
En 1995 ilustra La metamorfosis de Franz Kafka libro que se edita en Argentina, España, Méjico y Korea. Durante este año se realiza una exhibición de su obra en Frankfurt.
Durante el 2003 se aboca a trabajar sobre un mural para el teatro Independencia en la ciudad de Mendoza, en la cual ese mismo año se lo nombra Ciudadano Ilustre.
"Soy un escritor que utiliza otro tipo de caligrafía" dijo Luis Scafati en una entrevista que le hiciera el diario Perfil poco antes de su muestra en el Centro Cultural Recoleta.
Aunque en años recientes incursionó en la escultura, realizando tallas en madera policromada. Hoy trabaja en su estudio en Buenos Aires pasando largas temporadas en Vistalba, Mendoza" Allí tengo mis árboles y un refugio, una cueva de piedra donde dibujo, leo, escucho música y de vez en cuando descorcho una botella de buen malbec."