Repetto, Domingo Mirco (Mirco)
Dibujante y caricaturista argentino, nació en Génova - Italia en 1915 y falleció el 4 de febrero de 1999.
Dentro del mundo editorial, su primer trabajo como redactor fue en Bolita (donde estaban Lino Palacio y Raúl Roux, entre otros), apenas pasados los 15 años (1931/32).
Luego colaboró en Pololo, Mustafá y Barrilete. En estas dos últimas fue redactor, diagramador y director con apenas 20 años. Y realizó los primeros argumentos que dibujó Enrique Rapela. Trabajó en radio como libretista, pasó a dirigir Pilucho (revista infantil) y más tarde - en Fenómeno - hizo una historieta humorística de piratas, además de retocar obras extranjeras.
En 1939 realiza Don Alfonso en el diario socialista La Vanguardia. Allí apareció La vaca Aurora (un calificativo que se usaba en la época para tías y maestras gordas) y - en la edición dominical - Tadeo, el violinista.
En 1940, la vaca se muda a Carasucia, donde Mirco también hace Don Cleptómano.
Aurora más tarde aparece en Mundo Infantil, donde permanecerá alrededor de diez años.
En Patoruzú colaboró durante 1941 en la realización de la película Upa en Apuros y se quedó veinte años, trabajando como diagramador, redactor y guionista, además de ser director tanto de Patoruzú como de Patoruzito. En la primera hizo varios años el chiste mudo de la página tres, (firmando como Mirco), varias secciones personales y otras heredadas, los chistes a doble página de Gubellini, alguna idea de tapa, algún guión de Don Fierro y escribió cuentos con el seudónimo Tadeo de las Llanuras.
En la segunda fue, claro, el autor de los guiones del indiecito, calificados por Carlos Trillo y Guillermo Saccomanno como:
“…inteligentes, que proponían permanente acción, nuevos personajes y escenarios cambiantes”.
En la misma revista fue el creador de Vito Nervio, guionando otros personajes e historietas didácticas con temas argentinos.
Más tarde, cuando Quinterno ideó a Patora, fue Repetto quién le dio su particular carácter.
En 1961 se estableció en Paso del Rey, y siguió como colaborador por quince años más.
Disconforme con los nuevos directivos de la editorial (impuestos por los hijos de Quinterno), se fue a trabajar con García Ferré, para quién remozó personajes como Neurus, Larguirucho, Cachavacha e ideó los argumentos de Hijitus y Anteojito.
En la década del ’70, en tanto, La Vaca Aurora tuvo revista propia, de la que se publicaron una decena de números.